Sueldo de un residente PIR
Seguramente que si estás leyendo esto es porque te has preguntado cuánto gana un residente PIR. Sigue leyendo que te lo contamos.
El programa de residencia PIR ofrece a los residentes un salario y unas condiciones laborales específicas para su formación y desarrollo profesional.
Durante los cuatro años de residencia, los residentes reciben una remuneración económica acorde a la legislación vigente.
El sueldo se ajusta según el convenio establecido para los profesionales sanitarios en formación.
Aplica la categoría del grupo A1 – Facultativo en Formación
Al ser una competencia transferida a las Comunidades Autónomas puede variar de una Comunidad a otra. Pero las tablas salariales para el grupo A1 en el año 2023 están en el rango de entre 25.341 y 32.804 €
Este rango es el del sueldo base anual de 14 pagas al que habría que sumar otros complementos adicionales. Ya que, además del salario base, los residentes también pueden recibir complementos salariales por horas nocturnas, festivos o guardias, de acuerdo con la normativa aplicable. Estos complementos incrementan la retribución económica considerablemente.
Además va incrementándose año tras año a medida que el residente avanza en su formación.
Condiciones laborales de un residente PIR
En cuanto a las condiciones laborales, los residentes gozan de un régimen de trabajo que les permite adquirir la experiencia necesaria en diferentes dispositivos asistenciales.
Es importante destacar que, si bien los residentes están sometidos a una carga horaria exigente, se garantiza el cumplimiento de los límites establecidos por la legislación laboral. Esto contribuye a proteger la salud y el bienestar de los residentes, promoviendo un equilibrio adecuado entre la formación y el descanso.
Algunas de las pautas establecidas con respecto a las condiciones laborales son las siguientes:
- El residente estará obligado exclusivamente a realizar las horas de jornada complementaria que el programa formativo establezca para el curso correspondiente.
- La jornada laboral debe garantizar el cumplimiento de los programas formativos.
- Dentro de las posibilidades organizativas y funcionales de cada centro, se procurará disponer la jornada de los residentes de forma que la ordenación del tiempo de trabajo no perjudique su formación.
- No podrán celebrarse contratos de trabajo del personal residente con jornada a tiempo parcial.
Durante su residencia, realizan rotaciones en distintos servicios de salud mental, lo que les otorga la oportunidad de trabajar con diferentes grupos de población y conocer diversos estadios de trastornos psicopatológicos.
Asimismo, los residentes cuentan con el apoyo y la supervisión de profesionales especializados en psicología clínica, quienes los guían y orientan en su aprendizaje.
También tienen acceso a recursos formativos, como bibliotecas y documentación especializada, que les permiten profundizar en sus conocimientos y desarrollar habilidades prácticas.